¡Recordad!
Recordad la época en que la Muerte Negra asolaba Europa, el tiempo en que la cristiandad se retorcía por las luchas de poder entre los papas de Aviñón y Roma. Europa bañada por la muerte y la crisis. Nos encontramos en el siglo XIV.
Pero fue en medio de este paisaje desolador donde se produjo el primer Renacimiento de Occidente desde la caída del Mundo Antiguo en las profundas aguas del medievo.
El Gótico alzaba sus revolucionarios y vertiginosos templos como portales para la Otra Realidad; Dante, Petrarca y Bocaccio fundaban una nueva estética literaria y Giotto asombraba al mundo con la técnica de sus frescos. El arte en todas sus vertientes rompía las reglas del Arte Medieval y ponían sus ojos en zonas inexploradas. El objetivo de todo ello fue un movimiento oculto que preparó el terreno para la vuelta de la Antigua Espiritualidad a los dominios de Europa: el paganismo comenzaba su particular Renacimiento.
La música evidentemente fue una parte esencial de todo este proceso revolucionario. Para ello hubo que forjar alquímicamente un nuevo estilo: Philippe de Vitry acudió al olvidado poder de la palabra y lo llamó Ars Nova.
La complejidad y el virtuosismo fueron sus señas de identidad y la experimentación se convirtió en la herramienta básica para golpear en las anquilosadas mentes de los oyentes medievales y así prepararles para lo que estaba por llegar en las siguientes décadas. Los acordes triadas comenzaron a generalizarse, así como la utilización de figuras musicales más breves. El ritmo binario comenzó a rivalizar con el ternario que representaba la Sagrada Trinidad, dualismo frente a trinidad. Para todo ello hubo de producirse avances similares en la escritura musical.
En esta época sociedades secretas relacionadas con el legado templario hicieron su aparición. La Fe Santa, Los Fieles de Amor y posteriormente los Rosacruces. Su objetivo principal fue provocar una revolución espiritual del ser humano a través de las artes, incluyendo mensajes encriptados y usando un lenguaje simbólico para transmitir los Misterios de la Antigua Tradición.
¿Qué mensajes y conocimientos ocultan las obras de los músicos del siglo XIV? Guillaume de Machaut es un buen punto por el que comenzar a buscar ya que unía la herencia musical de los troveros con las revolucionarias teorías de Philippe de Vitry, auspiciando finalmente el Ars Subtilior, período donde las innovaciones del Ars Nova serán llevadas hasta límites insospechados...
El culto a la Ancestral Diosa Madre, que quiso ser enterrada por las religiones patriarcales, era lo que estaba detrás de todo esto. Los Ecos del Tiempo Antiguo volvían a resonar. Y nuestra Madre volvía a llamarnos...
Bar-Gal
Gran Guardián del Metal Ancestral
AstroMago del Numinoso Círculo Atlante